El aparato locomotor o sistema músculo-esquelético es el conjunto de estructuras corporales que permite al cuerpo realizar los movimientos. Este aparato está conformado por dos sistemas:
Sistema osteoarticular. Conjunto de ligamentos, articulaciones y huesos.
Sistema muscular. Conjunto de tendones y músculos.
El sistema digestivo es el sistema corporal que descompone los alimentos y absorbe los nutrientes. También se deshace de desechos sólidos. El sistema digestivo es principalmente un tubo largo que lleva desde la boca al ano, conocido como tracto gastrointestinal.
El sistema endócrino es una red compleja de glándulas y órganos. Emplea hormonas para controlar y coordinar el metabolismo interno del cuerpo (homeostasis), el nivel de energía, la reproducción, el crecimiento y desarrollo, y la respuesta a lesiones, estrés y factores ambientales.
El sistema nervioso es el sistema que dirige, supervisa y controla todas las funciones y actividades del cuerpo. Comprende un conjunto de órganos reguladores y una red que interconecta estos órganos con el resto del organismo.
El sistema circulatorio se encarga de bombear, transportar y distribuir la sangre por todo el cuerpo. Se integra con el corazón y los vasos sanguíneos: arterias, venas y capilares. El corazón es una bomba muscular y se considera el centro del sistema circulatorio. Las arterias transportan sangre oxigenada y con nutrientes desde el corazón hasta los tejidos, mientras que las venas llevan sangre poco oxigenada en dirección del corazón (las arterias y venas pulmonares son la única excepción a esta regla). Los capilares son el sitio donde tiene lugar el intercambio de nutrientes y gases entre la sangre y los tejidos.